La Vida y Legado del Cardenal Luis Pascual Dri
El cardenal Luis Pascual Dri fue una de las figuras más representativas del clero argentino, quien dejó una huella profunda en la comunidad religiosa al fallecer a los 98 años. Nacido en la localidad entrerriana de Federación, Dri se caracterizó por su humildad y su dedicación al servicio religioso, aspectos que no solo moldearon su vida, sino que también sirvieron de inspiración para muchos. Residió en el santuario de Nuestra Señora del Rosario de Nueva Pompeya durante sus últimos años, un lugar que se volvió su hogar espiritual, donde continuó ofreciendo su amor y apoyo a quienes lo rodeaban. Este santuario es ahora sede del dolor colectivo, ya que sus restos son velados en una serie de ceremonias que reflejan el cariño que sus feligreses le profesaron a lo largo de su vida.
Desde sus inicios en la vida religiosa, Dri mostró una especial inclinación hacia el sacramento de la confesión, convirtiéndose en un confesor de confianza y guía para innumerables personas. Su talento para escuchar y brindar consuelo lo hizo destacar, convirtiéndolo en un ejemplo de buen sacerdote y confesor, no solo para su comunidad, sino también para el papa Francisco, quien siempre reconoció las cualidades de Dri en este ámbito. Su carrera comenzó cuando fue ordenado sacerdote capuchino en Uruguay, donde desarrolló una vocación marcada por la entrega desinteresada y el deseo de ayudar a otros a acercarse a lo divino, una labor que jamás dejó de lado.
A medida que se extendían las ceremonias en su honor, la figura de Dri fue recordada no solo por su cercanía a la gente, sino también por su legado inquebrantable en la práctica del amor y la compasión divina. Los actos conmemorativos, que culminarán con una misa presidida por el actual arzobispo porteño, Jorge Ignacio García Cuerva, son testimonio del impacto que tuvo en la vida espiritual de tantos. En cada palabra y en cada gesto, el cardenal Dri seguía transmitiendo el amor y la dedicación a su vocación, dejando un legado que seguramente perdurará en los corazones de aquellos que lo conocieron.