spot_img

Hogar Emaús El Bolsón: Alivio frente al frío, al hambre y a la soledad

Lectura Obligada

El Hogar Emaús de Bariloche: Un Refugio de Esperanza

El Hogar Emaús, con sede en Bariloche y ahora también en El Bolsón, se ha convertido en un faro de esperanza para quienes enfrentan la difícil realidad de vivir en la calle. Fundado por el querido Padre Pepe, el hogar no solo ofrece un refugio físico, sino que también se erige como un espacio de contención humana en tiempos de adversidad. Situado junto a la parroquia Nuestra Señora de Luján, el hogar se encarga prácticamente a diario de recibir a personas que no tienen dónde dormir, brindando un plato caliente y un ambiente donde no se sienten solos. "Este año, increíblemente, lo que más los convoca no es tanto el frío, sino la comida y la compañía”, comparte Inés Hall, referente del voluntariado. Esto pone de manifiesto que la necesidad de conexión humana y apoyo emocional se ha vuelto tan vital como la asistencia material.

La vida en el hogar está llena de desafíos, pero también de solidaridad. Actualmente, Emaús cuenta con 11 camas, aunque muchas noches se improvisan colchones en el suelo para atender a las 8-10 personas que llegan en busca de un abrigo. "No todos pueden quedarse, ya que hay criterios que seguimos para proteger la armonía del espacio", aclara Adriana Otermín, quien coordina la actividad. Sin embargo, el equipo del hogar se asegura de que nadie se quede sin alimento, y siempre hay un lugar donde los huéspedes pueden ducharse y acceder a un ropero mantenido por donaciones. La cantidad de voluntarios que trabajan en el hogar es crucial, ya que su labor es continua y se necesitan manos extra para cubrir tareas de limpieza, cocina y mantenimiento. La importancia de estos esfuerzos se refleja en la transformación que vive cada voluntario, pues unirse al equipo se convierte en un compromiso que supera la simple buena voluntad.

El sostenimiento del Hogar Emaús se basa en un delicado equilibrio de donaciones, un convenio con el municipio y la venta de alimentos en eventos comunitarios. Sin embargo, los recursos son limitados, lo que hace que el llamado a la comunidad sea urgente. "Necesitamos más socios, más voluntarios, y un cambio en la percepción sobre las personas que están aquí. Muchos han sido golpeados por la vida y no se pueden considerar vagos o borrachos", argumenta Adriana. El hogar está abierto no solo para quienes necesitan ayuda, sino también para aquellos que quieren hacer una diferencia. Quienes deseen colaborar pueden hacerlo a través de aportes económicos o sumándose como voluntarios en diversas tareas. Así, el Hogar Emaús se convierte en un ejemplo tangible de que la solidaridad y la comunidad pueden cambiar vidas, ofreciendo no solo un refugio, sino también un cálido abrazo humano.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here

spot_img
Últimas Noticias

Gonzalo Tapia habló por fin sobre su salida de River: “Lo que aprendí…”

Gonzalo Tapia: Un Nuevo Reto en San Pablo El futbolista chileno Gonzalo Tapia fue presentado oficialmente este lunes como nuevo...
spot_img

Más artículos como este