Alerta por fentanilo contaminado en Río Negro: un llamado a la precaución
Recientemente, el Ministerio de Salud de Río Negro lanzó una alerta ante la sospecha de un brote de enfermedad asociada al uso de fentanilo contaminado en Viedma. Este anuncio se produce en un contexto alarmante, dado que el fentanilo ha sido vinculado a numerosas muertes en todo el país. La situación ha puesto en marcha protocolos de emergencia, como el que se aplicó el 12 de mayo por la ANMAT, prohibiendo la comercialización y distribución de productos elaborados por el laboratorio HLB Pharma, responsable del fentanilo mencionado. La preocupación sobre este tema también ha llevado a la droguería ALFARMA S.R.L. a ser suspendida e inhabilitada temporalmente, sumando más presión sobre las autoridades sanitarias.
En respuesta a esta crisis, se han adoptado medidas inmediatas en Bariloche y otros lugares de Río Negro. El sistema de salud local, incluidos hospitales públicos y privados, ha trabajado de manera coordinada para retirar absolutamente toda la medicación relacionada con la firma mencionada, lo que representa un total de 45 mil ampollas recolectadas. Este proceso fue llevado a cabo con agilidad, garantizando que ninguna unidad comprometida estuviera en circulación. La acción se ha ejecutado en cumplimiento de la Disposición N°3156/25 publicada en el Boletín Oficial el 13 de mayo, y refleja el compromiso del sistema de salud para salvaguardar a la población.
El caso sospechoso de Viedma, que involucra a un paciente internado en un centro privado, está siendo minuciosamente investigado. Leonardo Gil, secretario de Salud de Río Negro, ha declarado que se sigue el protocolo establecido por la Coordinación Provincial de Epidemiología. Esto incluye la recolección de datos relevantes, como la historia clínica del paciente y los resultados de laboratorio. La colaboración entre los organismos locales y nacionales es crucial para determinar la naturaleza del caso y, en caso de confirmar el vínculo con el fentanilo contaminado, implementar las medidas necesarias que protejan a la comunidad. La situación actual destaca la necesidad de una vigilancia continua en la distribución de medicamentos, especialmente aquellos tan peligrosos como el fentanilo.
