Crisis en el Hospital Artémides Zatti de Viedma
Renuncias Masivas en el Hospital
En un acontecimiento sin precedentes, el 17 de diciembre de 2025, la jefa del Departamento de Enfermería del Hospital Regional Artémides Zatti de Viedma presentó su renuncia, junto con el 97% de los jefes de servicio. Este drástico paso es resultado de la grave falta de personal en el sector de enfermería, lo cual ha llevado a una situación insostenible para atender las crecientes demandas de atención y cuidados en la población local y regional. La noticia fue confirmada a través de un comunicado emitido por el gremio ASSPUR y la federación FESPROSA, quienes han estado advirtiendo sobre esta crisis durante los últimos tres años sin haber recibido soluciones concretas por parte de las autoridades.
Condiciones Laborales Críticas
El escenario actual en el hospital es preocupante. Con una plantilla “extremadamente reducida”, el sistema se ve obligado a funcionar con personal enfermo que asiste al trabajo, además de afrontar la sobrecarga típica de la temporada de verano. Las vacaciones no pueden ser reemplazadas y las horas extras se acumulan de manera insostenible. Este panorama no solo está afectando la salud mental y física del equipo, sino que también pone en riesgo la atención de los pacientes. Como revelan los datos, hay trabajadores que, a pesar de enfrentar serias condiciones de salud, siguen brindando servicios esenciales, evidenciando la precariedad en la que se encuentra el sector.
Responsabilidad del Gobierno
Las voces de ASSPUR y FESPROSA han señalado al Ministro de Salud, Demetrio Thalasselis, y a otras figuras destacadas como Silvia Heckel y el gobernador Alberto Weretilneck como responsables de esta crisis. Según el comunicado, la situación no es accidental ni transitoria, sino el resultado de años de desinversión y falta de atención a los problemas de salud pública. Tanto los representantes gremiales como los profesionales de la salud coinciden en que varios hospitales en la provincia están enfrentando problemas similares, lo que revela un patrón alarmante en la gestión de servicios de salud en la región.


