La Condena a Daniel Sibestrelli: Un Caso de Crimen de Odio y Violencia de Género

El Tribunal Oral Criminal N°2 de La Plata ha emitido un fallo contundente al condenar a prisión perpetua a Daniel Sibestrelli por el asesinato de Nicol Ruiz, una mujer trans de 35 años. Este caso escalofriante ocurrió en septiembre de 2022, cuando Nicol intervino para defender a su hermana menor de un ataque violento. La sentencia no solo resalta la gravedad del crimen, sino que también lo clasifica como un travesticidio, subrayando la existencia de odio hacia las identidades trans y la violencia de género que persiste en nuestra sociedad.

La Larga Lucha por Justicia

El juicio de solo cuatro audiencias estuvo rodeado por la tensión y la indignación de la familia de Nicol, amigos y organizaciones sociales. Todos clamaban que se reconociera el crimen como un acto de odio. Los jueces Silvia Hoerr, Analía Carrillo y Claudio Joaquín Bernard concluyeron que el crimen constituía una violencia de género dirigida hacia una persona de la comunidad LGTBI, aplicando la protección ofrecida por la Convención Belén Do Pará. Durante el juicio, varias declaraciones de testigos coincidieron en el patrón de comportamiento agresivo de Sibestrelli, quien no dudaba en proferir insultos discriminatorios. “Siempre nos decía que éramos putos”, relató una amiga de Nicol, mostrando la cotidianidad del discurso de odio que tanto daño provoca.

La Noche del Crimen

La trágica noche del 23 de septiembre de 2022 cambió la vida de muchas personas. Nicol, al escuchar gritos desesperados, corrió a la casa de su hermana Oriana para tratar de ayudarla. Lo que encontró fue a Sibestrelli, expareja de Oriana y con un historial criminal, agrediendo a la joven. En un intento por protegerla, Nicol fue brutalmente golpeada con un palo en la cabeza. A pesar de sus esfuerzos por salvar a su hermana, terminó siendo víctima de la violencia del hombre. Después de dejarla gravemente herida, Sibestrelli intentó engañar a los médicos en el hospital San Martín, alegando que Nicol se había caído de la moto, pero su estado reveló la severidad de la agresión. Después de tres días en terapia intensiva, Nicol falleció, dejando un vacío irreparable entre sus seres queridos y la comunidad.

Este caso no es solo una trágica historia, sino un recordatorio de la urgencia de erradicar la violencia de género y la discriminación hacia las identidades trans. La condena de Sibestrelli marca un paso adelante en la búsqueda de justicia, pero subraya aún más la necesidad de crear un entorno más seguro e inclusivo para todos.