La Sentencia que Marcará un Antes y un Después
El 5 de diciembre de 2025 se publicó una sentencia crucial sobre el caso de Gabriel Di Tullio, quien enfrentó cargos por administración fraudulenta. La decisión del Tribunal de Impugnación revocó el fallo que había absuelto a Di Tullio, considerado culpable de haber abusado de la confianza de un amigo y cliente al vender terrenos que debía administrar. En su dictamen, el tribunal hizo hincapié en que el acusado utilizó su posición de poder para llevar a cabo una transacción irregular que perjudicó directamente al inversor.
El Caso de los Terrenos en Bariloche
La trama se centra en una operación realizada en febrero de 2021, cuando un inversor firmó dos boletos de compraventa de once lotes en el fideicomiso “Solares de Bariloche”. Di Tullio recibió un poder especial para actuar en representación del inversionista, lo cual le otorgaba una amplia gama de capacidades. Sin embargo, meses más tarde, el acusado vendió esos mismos lotes a una sociedad con vínculos personales, y a un precio significativamente inferior al del mercado, sin consultar a quien le había otorgado el poder. Este hecho reveló una clara falta de ética y transparencia en su actuar.
Diligencia y Deliberación
El fallo del tribunal destacó no solo el perjuicio económico que sufría el inversor, sino también la conducta deliberada de Di Tullio. Según el Tribunal, las acciones del acusado fueron claras: cortó la comunicación justo en el momento de la venta y omitiendo rendir cuentas a quien le había confiado la administración de los terrenos. Este tipo de relaciones entre el apoderado y el mandante, construidas a lo largo de años, fueron consideradas como un factor que facilitó la maniobra fraudulenta. El Tribunal resolvió que Di Tullio se aprovechó de esta confianza para actuar sin los debidos resguardos, consolidando así su responsabilidad penal.


