Un nuevo capítulo en el caso de las presuntas coimas en ANDIS
En un desarrollo sorprendente en el caso de las supuestas coimas dentro de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), los peritos han comunicado a los investigadores que es imposible recuperar los mensajes eliminados del teléfono de Diego Spagnuolo, quien se desempeñó como director de la entidad. Esta revelación ha llegado hasta el juez federal Sebastián Casanello y el fiscal Franco Picardi, quienes han estado a la cabeza de esta investigación que ha generado un gran revuelo. La Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (DATIP) ha explicado que el método sofisticado utilizado para borrar estas comunicaciones es lo que impide su recuperación, lo que sin duda genera más interrogantes sobre el contenido y la naturaleza de dichos mensajes.
El operativo policial llevado a cabo en la residencia de Spagnuolo en Pilar, Buenos Aires, hace dos semanas, fue crucial. Durante este procedimiento, las autoridades secuestraron dos teléfonos móviles de su propiedad. Sin embargo, Spagnuolo los entregó apagados y sin ofrecer las contraseñas correspondientes, lo que complicó aún más la situación. Mientras que uno de los dispositivos resultó ser anticuado y no contenía información relevante, el otro mostró haber tenido conversaciones eliminadas. Según fuentes judiciales, estas comunicaciones incluyen charlas con figuras importantes, como el actual presidente, Javier Milei, y su hermana, Karina Milei, quien es secretaria General de la Presidencia. Este hallazgo refleja vínculos cercanos y plantea preguntas sobre los motivos que llevaron a Spagnuolo a eliminar esas interacciones.
La complejidad del caso se incrementa con la posibilidad de acceder a los teléfonos de Jonathan y Emmanuel Kovalivker, relacionados con la Droguería Suizo Argentina, un actor clave bajo la lupa de la justicia. Uno de sus dispositivos de última generación aún no ha sido desbloqueado, requiriendo la asistencia de la empresa israelí Cellebrite, mientras que el otro ya se encuentra en manos de las autoridades federales para su análisis forense. Los expertos están trabajando arduamente para reconstruir los datos borrados, conscientes de que el nivel de sofisticación del proceso de eliminación podría traer consigo varios inconvenientes. Sin embargo, hay esperanzas de que, con tiempo y recursos, se logre recuperar información decisiva que esclarezca este controvertido caso y revele la magnitud de los vínculos políticos y los hechos cuestionables dentro del ámbito gubernamental.