Celebración de la Independencia en Bariloche
Un día patriótico lleno de color
Este miércoles 9 de julio de 2025, Bariloche se sumó a la conmemoración de los 209 años de la Independencia Nacional, luciendo un vibrante celeste y blanco que llenó las calles de sentimiento patriótico. Encabezado por el intendente Walter Cortés, el acto central atrajo a cientos de vecinos, quienes se reunieron con entusiasmo para disfrutar de una celebración que, más allá de ser un mero acto formal, se convirtió en una fiesta de la comunidad. La calle 9 de Julio, recién asfaltada, se transformó en el escenario perfecto para esta ocasión, donde las banderas ondeaban, la música folklórica retumbaba y el aroma del locro llenaba el aire, convirtiendo la jornada en una postal inolvidable.
Tradición y emociones en el desfile
La jornada comenzó temprano, con un ambiente festivo que se respiraba desde el primer instante. Los clásicos pastelitos dieron la bienvenida a los asistentes, quienes se acomodaron para el acto formal. Tras las emotivas palabras de Corte, el Ballet Folklórico Municipal Tolkeyen tomó el protagonismo, haciendo vibrar a los presentes con una interpretación conmovedora del Pericón Nacional, una danza que simboliza la unión y la tradición argentina. Al compás del desfile, agrupaciones sociales, deportivas, escolares, militares y tradicionalistas marcharon con orgullo, mostrando un pedacito de la rica diversidad cultural de la región y reafirmando el valor de la historia compartida.
Sabores que unen a la comunidad
La gastronomía típica fue, sin lugar a dudas, uno de los protagonistas de esta celebración. El locro patriótico, preparado por diversas instituciones locales, se distribuyó gratuitamente entre los asistentes, demostrando el espíritu de comunidad y la capacidad organizativa de Bariloche. Las ollas humeantes representaban más que simple alimento; eran un símbolo de encuentro, memoria y cultura popular. Desde los más pequeños, ondeando sus banderas, hasta los veteranos luciendo con orgullo sus medallas, cada paso en la calle 9 de Julio resonó con el latido de una ciudad que no solo celebra su historia, sino que también se compromete con su futuro.