Bariloche, un ejemplo de resiliencia ante el temporal
Durante la primera fuerte nevada del invierno, Bariloche se mostró como un ejemplo de preparación y eficacia al enfrentar las inclemencias del tiempo. Gracias a una combinación de operativos preventivos por parte de Aguas Rionegrinas y la Cooperativa de Electricidad Bariloche (CEB), la ciudad logró mantener servicios esenciales como el agua y la electricidad sin interrupciones. Este éxito se fundamenta en planes anticipados, significativamente respaldados por inversiones en infraestructura y un trabajo coordinado con la comunidad.
Desde Aguas Rionegrinas, se implementó un riguroso esquema de monitoreo constante de redes y se tomaron medidas para prevenir el congelamiento de cañerías. Además, se informó a los vecinos sobre prácticas que podrían proteger sus instalaciones, lo cual demostró ser eficaz, ya que muchos ciudadanos tomaron precauciones. La empresa también aumentó su capacidad operativa incorporando cuadrillas adicionales, cifra que refleja la inversión de más de 150 millones de pesos en la ciudad, destinada a mejorar herramientas e insumos. A esto se añade la inminente entrega de nuevas camionetas y maquinaria moderna, que destaca un compromiso firme por parte del gobierno provincial.
Por su parte, la CEB no se quedó atrás y, al igual que Aguas Rionegrinas, implementó un plan preventivo que incluyó podas y mantenimientos anticipados en la red eléctrica. La proactividad se reflejó en la reducción notable de cortes de servicio, a diferencia de años anteriores donde los temporales habían causado estragos. Alejandro Pozas, presidente de la Cooperativa, resaltó la importancia de estas acciones preventivas, las cuales han permitido una respuesta más eficiente ante situaciones adversas. La comunicación ágil con la comunidad fue también un pilar clave, facilitando que se activaran recursos e intervenciones rápidamente ante cualquier riesgo. Todo esto ha contribuido a que Bariloche no solo navegue bien los desafíos del clima invernal, sino que también refleje un modelo de interacción entre servicios esenciales y la ciudadanía.
