La polémica sobre los sueldos en la UBA: un cruce en redes sociales
Recientemente, el debate sobre los sueldos en la Universidad de Buenos Aires (UBA) tomó un giro inesperado cuando el ministro de Economía, Luis Caputo, cuestionó la remuneración del vicerrector Emiliano Yacobitti. En un comentario provocador en redes sociales, Caputo replicó una afirmación errónea de un usuario que sostenía que Yacobitti ganaba la exorbitante cifra de 18 millones de pesos al mes. Esta afirmación se originó en un post en Twitter que se volvió viral, donde el usuario @TalidanMilei compartía un video editado de Yacobitti y cuestionaba su postura sobre los impuestos. La acusación encendió las redes, llevando a muchos a preguntarse cómo se sustentan los sueldos en el ámbito universitario y qué implicancias tienen en la política educativa del país.
Yacobitti no tardó en responder y lo hizo con contundencia, presentando pruebas fehacientes de su salario real. A través de sus recibos de sueldo, dejó claro que sus ingresos están muy por debajo de los 18 millones que se le atribuían, acercándose más a una cifra que rondaría los 2 millones de pesos brutos. En un intercambio que puso en el foco no solo su salario, sino también el manejo de información por parte del ministro, el vicerrector calificó de irresponsable la acusación y apuntó a la necesidad de que los funcionarios públicos verifiquen la información antes de lanzarse a hacer declaraciones que pueden afectar la reputación de las personas. Su defensa no solo se sustentó en números, sino también en su trayectoria profesional, enfatizando su compromiso con la educación y la administración pública.
La controversia se amplió aún más cuando Alejandro Álvarez, Subsecretario de Políticas Universitarias, se unió al debate y mencionó salarios de otros altos funcionarios universitarios, sugiriendo que varios de ellos también perciben cifras millonarias. Sin embargo, al igual que Caputo, sus afirmaciones carecieron de especificidad y nombres, lo que dejó a muchos cuestionando la validez de sus declaraciones. Esto abre un amplio espectro de reflexión sobre el financiamiento universitario y la manera en que se comunican estos temas en la esfera pública. En medio de un contexto donde la educación y sus recursos son cada vez más críticos, el cruce entre estos funcionarios subraya la importancia de la transparencia y la veracidad en la discusión sobre salarios y financiamiento en el ámbito universitario.


