La compleja realidad invernal en Bariloche
Suspensión de clases por problemas de abastecimiento
En un invierno que ha desafiado las expectativas climáticas, 11 escuelas en Bariloche se vieron obligadas a suspender las clases este lunes debido a la falta de agua corriente. El intenso frío, con temperaturas que llegaron a 14 grados bajo cero, provocó el congelamiento de las cañerías, afectando el ingreso de agua a los establecimientos educativos. La situación se complicó a pesar de que, según indicó el delegado de Educación, Santiago Velázquez, se habían tomado precauciones anticipadas para evitar inconvenientes. Sin embargo, las condiciones climáticas superaron las expectativas del equipo.
El esfuerzo de las autoridades y Aguas Rionegrinas
Santiago Velázquez explicó que se trabajó durante el fin de semana junto a Aguas Rionegrinas para examinar las cañerías y preparar un plan de acción. “Sabemos que la escuela es un lugar crucial para muchos chicos, no solo para aprender, sino también para alimentarse”, comentó Velázquez. Aunque la suspensión de clases fue la última opción, era necesaria para resguardar la salud de los estudiantes. Además, se evalúa la posibilidad de demorar el horario de ingreso de los alumnos para poder continuar con el fluido de clases en las mejores condiciones posibles.
Preocupaciones sobre la infraestructura
Otro punto crítico mencionado por Velázquez es la vulnerabilidad de la infraestructura existente. Muchos de los caños son antiguos, lo que aumenta el riesgo tanto de congelamiento como de posibles roturas una vez que las temperaturas comiencen a subir. “Después de las seis de la tarde vamos a comunicar cómo vamos a proceder”, adelantó, anticipando que la situación puede cambiar con los pronósticos a corto plazo. Esperan que las temperaturas se tornen más benévolas, lo que podría aliviar los problemas de abastecimiento en las escuelas y asegurar que los estudiantes puedan volver a sus aulas.
