Preocupación por el escaso recurso hídrico en un invierno atípico
La situación climática en nuestro país se presenta alarmante: un invierno seco y temperaturas que no parecen ser propias de esta época del año. Ante esta realidad, el Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF) ha comenzado a implementar una serie de medidas destinadas a mitigar los riesgos asociados a incendios forestales. Orlando Báez, jefe del SPLIF, comentó en una entrevista con El Cordillerano Radio que están organizando reuniones con diferentes áreas para evaluar la posibilidad de anticipar el cierre de la época de quema. Esta decisión busca reducir el volumen de poda y limpieza en terrenos particulares, además de proteger la flora y fauna locales.
Estrategias de intervención y colaboración
Báez resaltó que el equipo del SPLIF se está ocupando activamente de esta problemática, anticipando un verano que podría ser más complicado de lo habitual. Como parte de las estrategias de intervención, se están analizando situaciones en las que un descuido en la reducción de combustible por parte de vecinos podría derivar en incendios. También hay preocupación por el riesgo de incendios intencionales. En este sentido, se están llevando a cabo conversaciones con diversas brigadas y actores involucrados en el combate de incendios para fortalecer la coordinación y enfrentar adecuadamente los desafíos que se avecinan.
Desafíos legislativos y recursos limitados
En el ámbito legislativo, Báez expresó su frustración por los retrocesos en las políticas públicas que afectan la prevención y el manejo de incendios. La falta de legislación efectiva para combatir la venta de tierras afectadas por incendios intencionales dificulta aún más la situación. Además, se enfrenta a la escasez de recursos humanos y materiales. Aunque existen esfuerzos a nivel provincial para adquirir nuevos equipos y contratar personal, la realidad de ataques intencionales limita la efectividad de estas acciones. Con más de 1800 brigadistas en el país, la colaboración entre ellos y una relación fluida con otros actores son esenciales para enfrentar veranos que prometen ser cada vez más desafiantes. Con la eliminación del Fondo Fiduciario del Plan Nacional del Manejo de Fuego, la incertidumbre sobre la financiación y la falta de un coordinador patagónico complican aún más la gestión de recursos en la lucha contra incendios.