La Nueva Reforma Arancelaria de la ANMAT: Un Cambio Necesario para el Sector Alimentario
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos, y Tecnología Médica (ANMAT) ha dado un paso audaz al reformar su sistema arancelario para las importaciones de alimentos. A partir del 26 de julio de 2025, los importadores deberán adaptarse a una tasa única del 0,5% sobre el valor FOB de las mercancías, en lugar del complicado esquema de aranceles escalonados que existía previamente. Esta decisión, formalizada en la Disposición 4538/2025, busca eliminar las distorsiones y simplificar el proceso de importación, promoviendo una mayor equidad y simplicidad en un mercado que, hasta ahora, había estado marcado por la confusión y los costos excesivos.
Una de las motivaciones detrás de esta reforma es la historia de ineficacia del sistema anterior, que no solo complicaba el procedimiento de importación, sino que también aumentaba los costos para los empresarios. Según datos recientes, solo en el primer trimestre de este año, los costos para el sector alcanzaron la exorbitante cifra de $14,8 millones, cifra que podría haberse reducido a solo $2,8 millones bajo el nuevo arancel del 0,5%. Este tipo de distorsiones no solo afectan a las empresas individuales, sino que también repercuten en el mercado en general, disminuyendo la competitividad y aumentando los precios para los consumidores.
Por otro lado, el sistema escalonado de aranceles también generaba un tratamiento desigual en función del valor de las mercancías. En muchos casos, un importador podía verse obligado a pagar aranceles mucho más altos que el valor real de la mercadería. Por ejemplo, si se ingresan bienes por $25.000, el arancel podía superar los $52.500, creando situaciones insostenibles. Las autoridades reconocieron que estas inconsistencias perjudicaban la equidad del régimen arancelario, afectando en particular a las operaciones más pequeñas. Con la implementación de la nueva tasa única, se espera no solo simplificar los procesos administrativos, sino también fomentar un entorno más justo para todos los actores del sector alimentario.
