A casi tres décadas del fenómeno televisivo “Cebollitas”, su protagonista Martín Miani, quien interpretó a Tomás en la exitosa serie infantil de Telefe, ha decidido tomar una nueva dirección en su vida. Alejado del mundo artístico, Martín se ha embarcado en una carrera de militancia política en Morón, su municipio natal. En una reciente entrevista, Miani expresó que su experiencia como actor infantil le ha dejado una mirada crítica sobre lo que significa crecer en el ojo público. “Siento que le puedo aportar a la sociedad cosas positivas”, afirmó con entusiasmo. Desde su niñez en las grabaciones del programa que marcó a toda una generación, Martín ha vivido un proceso de transformación que lo lleva a priorizar su rol como padre y su deseo de generar un impacto en la comunidad que lo vio crecer.
El deseo de involucrarse en la política surge de una necesidad personal de Miani. En sus propias palabras: “Uno, desde afuera como ciudadano, ve cosas que no le gustan”. Aunque actualmente no ocupa un cargo público, se siente comprometido con su agrupación peronista y con el intendente Lucas Ghi, buscando maneras de contribuir y mejorar la vida en su barrio. Su compromiso se siente aún más fuerte al ser padre de tres hijos, lo que lo lleva a querer dejarles un legado positivo y un ejemplo de participación comunitaria. Miani destaca que su intención es construir desde el territorio, abordando las necesidades de una comunidad que conoce bien. Sus anhelos de transformación social son un reflejo de su dedicación a su entorno diario, un acercamiento que busca empoderar y proporcionar herramientas a quienes lo rodean.
Martín también ha abordado su paso por la televisión, revelando aspectos de su experiencia que invitan a una reflexión crítica sobre la infancia en el medio artístico. En sus relatos, menciona las arduas jornadas de grabación y los altos niveles de presión a los que estaban sometidos, incluso tiempos en los que se recurría a medidas poco ortodoxas, como el café con aspirina para soportar las largas horas de trabajo. Sus declaraciones se suman a las voces de otros actores del elenco que han hablado sobre olores de maltrato y condiciones laborales inadecuadas. A pesar de que en su caso, fue afortunado al estar acompañado por sus padres, Miani sostiene que la extenuante rutina de un niño artista no debería ser la norma. Reflexionando sobre su actual rol como padre, comparte su deseo de que su propio hijo tenga una infancia plena y libre de presiones, un legado que ahora busca fomentar desde su nuevo camino político.
