Un rayo de esperanza: el repunte del Índice de Confianza del Consumidor
En mayo, el Índice de Confianza del Consumidor (ICC) experimentó un sobresaliente aumento, alcanzando un valor de 45,49. Este notable incremento del 3,1% respecto al mes anterior se presenta como un soplo de optimismo luego de tres meses de caídas consecutivas. Según el informe de la Universidad Torcuato Di Tella, el crecimiento interanual es aún más alentador, con un avance del 18,8%. Este cambio refleja una posible recuperación en la percepción de los consumidores, quienes, tras meses de incertidumbre, comienzan a ver la luz al final del túnel.
Este repunte no ha sido uniforme en todo el país. Las regiones del Interior y el Gran Buenos Aires (GBA) se destacaron con incrementos del 3,3% y 3,1% respectivamente. En contraposición, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) mostró una leve mejora del 0,6%. Dentro de los componentes del ICC, la percepción de la Situación Macroeconómica lideró este crecimiento, con un aumento del 5,3%. Las categorías de Bienes Durables e Inmuebles, y la Situación Personal también mostraron avances, aunque en menor medida, con un incremento del 3,1% y del 0,16% respectivamente.
Es interesante observar cómo este cambio en la confianza se distribuye entre diferentes estratos sociales. Los hogares de menores ingresos se sienten más optimistas, registrando un aumento del 4,42%, mientras que aquellos de altos ingresos enfrentaron una caída del 0,65%. Al analizar las expectativas a futuro, se destaca un crecimiento del 4,90%, evidenciando una mayor claridad sobre lo que vendrá. Este cambio en la perspectiva es clave para entender el comportamiento del consumo y puede influir en la economía a mediano y largo plazo. Por otro lado, las Condiciones Presentes crecieron solo un 0,50%, lo que indica que, aunque haya optimismo, aún queda camino por recorrer.