Impacto del Aumento en la Canasta de Crianza: Un Desafío para las Familias
En medio de un entorno económico complicado, un reciente informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) ha puesto en relieve un notable aumento en la ‘canasta de crianza’, que ahora camina por un complicado sendero financiero para los padres. Durante el mes de julio, este indicador sufrió un incremento del 4%, un número que supera ampliamente a la inflación general de 1,9%. Este crecimiento revela las crecientes presiones económicas que los padres enfrentan día a día para asegurar el bienestar básico de sus hijos. Los costos de la crianza varían entre los $411.201 y los $517.364, dependiendo de la edad del niño, mostrando diferencias marcadas que reflejan la presión financiera en diferentes etapas de desarrollo infantil.
El mes de julio no solo trajo consigo nuevos números, sino que también marcó un punto de inflexión después de dos meses de estabilidad aparente. Para un recién nacido, el costo se elevó a $427.889; para los pequeños de entre 1 y 3 años, se registró un gasto de $508.333; y para aquellos de 4 a 5 años, el monto alcanzó los $426.741. Los niños de entre 6 y 12 años representaron el mayor gasto, con un promedio de $536.830. Este aumento es alarmante, especialmente considerando que los incrementos han estado impulsados principalmente por las subas en los precios de bienes y servicios, ya que los costos de cuidado, como el de la asistencia doméstica, se han mantenido más o menos estables desde enero.
La canasta de crianza, que INDEC lanzó en marzo de 2024, juega un rol fundamental no solo como una métrica sobre los costos de criar a un niño en Argentina, sino también como una herramienta valiosa en el ámbito judicial. Este indicador incluye gastos en alimentación, vestimenta, vivienda, transporte y salud, además del tiempo que los padres dedican a estas tareas. “Asistencia y cuidado de personas” es una categoría que se refiere al trabajo de quienes cuidan a los niños, y su inclusión busca dar visibilidad a la realidad económica de la crianza. En este sentido, los datos recopilados sirven para determinar cuotas alimentarias en situaciones de separación o disolución familiar, haciendo que la canasta de crianza sea un insumo relevante en el campo judicial. La creciente disparidad entre el aumento de esta canasta y la inflación general demanda una respuesta efectiva ante un desafío cada vez más complejo para las familias argentinas.