Un Último Adiós a Mario Mactas
El pasado 12 de julio, el periodismo argentino recibió una pérdida dolorosa con el fallecimiento de Mario Mactas a los 80 años. En un emotivo homenaje en TN, su hija Mariana ocupó la silla emblemática que él solía utilizar para hacer “El Toque Mactas”. Rodeada de compañeros de su padre, Mariana compartió su dolor y cariño con historias que mostraron la profundidad del vínculo entre padre e hija. En su discurso, resaltó el impacto que su padre tuvo en la vida de quienes lo conocieron y cómo su forma de ser llenaba de afecto a todos aquellos que cruzaban su camino. "Era muy afectuoso, supo hacer de cada momento uno especial", dijo Mariana, recordando con nostalgia los elogios y frases cálidas que Mactas solía ofrecer a su familia y amigos.
La elegancia y discreción de Mario también fueron temas recurrentes en las palabras de su hija. Mariana recordó cómo, incluso en sus últimos días, su padre no era alguien que exigiera atención, sino que, en su carácter inconfundible, encaró su partida con una dignidad que define su legado. "Pensé que iba a estar más tiempo con nosotros", expresó Mariana, y a medida que hablaba, se hizo evidente la admiración que sentía por la manera en que su padre vivió y cómo dejó huella en el mundo del periodismo. A través de su particular “toque Mactas”, Mario logró mantener un estilo auténtico, que desafiaba las convenciones y celebraba la diversidad de opiniones sin pertenecer a un bando específico.
Además de ser un padre cariñoso y un profesional respetado, Mario Mactas también dejó un legado cultural a través de su trabajo en radio, televisión y literatura. Su carrera se convirtió en un referente al combinar humor y agudeza en sus críticas, elementos que resonaban con el público argentino. Su hija, Mariana, además de seguir sus pasos en el periodismo, también es la creadora del documental “Un tal Mario”, que explora la vida de su padre y destaca su habilidad para convertir adversidades, como el exilio, en oportunidades creativas. Así, con el cariño de sus seres queridos y el reconocimiento de sus colegas, Mario Mactas se despide dejando una estela de amor y admiración en el corazón de todos los que tuvieron la fortuna de conocerlo y aprender de él.