Bariloche avanza con obras concretas que resisten el invierno. El intendente encabezará el acto patrio sobre una nueva calzada de hormigón, en el corazón de la ciudad.
Obras reales antes del frío
En plena cuenta regresiva hacia el invierno, el Gobierno Municipal de Bariloche acelera el paso con la pavimentación de calles de hormigón elaborado. Según explicó el secretario de Obras Públicas, Jorge Quilaleo, las tareas siguen firmes en distintos sectores de la ciudad, incluyendo la calle 9 de Julio, donde ya se ve el cambio.
“Nuestro objetivo es dejar obras duraderas y de calidad, bien supervisadas, como siempre lo hacemos en esta gestión que encabeza Walter Cortés”, afirmó Quilaleo. El próximo 9 de julio, el tradicional acto cívico-militar se realizará sobre la flamante calzada pavimentada, entre calle Brown y zonas aledañas, con locro popular y banderas que buscarán reforzar el sentido de comunidad y patria.
Cuidar lo que se construye: un llamado a los vecinos
Las cuadrillas trabajan incluso con temperaturas muy bajas gracias a un sistema de aditivos anticongelantes que protegen el fraguado del hormigón. A pesar de eso, desde el Municipio piden la colaboración de los vecinos para no retirar los nylons que cubren el pavimento fresco.
“El viernes pasado tuvimos que tirar 50 metros por la lluvia. Si se arruina, se pierde tiempo, recursos y esfuerzo de muchos trabajadores. Queremos que la comunidad entienda que esto es de todos”, remarcó Quilaleo.
Los hechos hablan: las críticas no frenan el avance
Consultado por cuestionamientos en redes sociales, el funcionario fue claro: “Algunos hacen memes y videítos. Nosotros hacemos obras. Y los hechos son los hechos”.
También confirmó que las obras en la calle Sobral continúan y que todos los detalles técnicos, como las tapas pluviales, están siendo cuidadosamente controlados. “No estamos maquillando nada. Estamos mejorando con obras concretas, bien hechas, para todos los barilochenses”, concluyó.
Un intendente con mirada puesta en el crecimiento
En medio de un escenario nacional marcado por la parálisis de la obra pública, Bariloche sigue mostrando que con gestión, decisión y presencia territorial, se puede avanzar. El 9 de Julio será mucho más que una fecha patria: será una oportunidad para celebrar obras reales, con sello propio, encabezadas por un intendente que cree en el desarrollo y no se queda en discursos.
Walter Cortés no se detiene: sigue asfaltando el camino.
