Tensión Política entre Javier Milei y Victoria Villarruel: Un Distanciamiento Creciente
La relación entre Javier Milei y Victoria Villarruel ha pasado de ser una alianza política a un episodio tenso que ha captado la atención de los medios y el público. En un claro indicativo de este distanciamiento, desde la Secretaría General de la Presidencia, liderada por Karina Milei, se ha confirmado que no se extenderá invitación a Villarruel para el evento que Milei tiene programado en el Campo Argentino de Polo. Este gesto no es accidental, sino que refleja la ruptura en las relaciones, que se ha vuelto evidente en las últimas semanas. Anteriormente, ambos habían coincidido en diversas ceremonias, pero el ámbito de lo protocolar ha dejado de ser el lugar donde ambos puedan interactuar.
El Día de la Bandera será un claro reflejo de cuando, en lugar de compartir un espacio, ambos políticos asistirán a eventos separados. Mientras Milei se prepara para liderar un acto en la Capital Federal, Villarruel se dirigirá a Rosario, donde participará en una actividad organizada por el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. Este cambio de dirección en sus agendas es significativo y acentúa aún más la ruptura, visibilizando un distanciamiento que se ha gestado a nivel comunicacional y operativo en La Libertad Avanza.
Los episodios de tensión entre ambos han sido múltiples y notables. Durante la ceremonia del 25 de mayo en la Catedral Metropolitana, Milei eludió saludar a Villarruel, y sus comentarios sobre la traición suelen insistir en una falta de confianza entre ellos. A su vez, en sesiones del Congreso, el Presidente ha interrumpido a Villarruel y ha evadido su presencia en eventos clave. Estos desacuerdos han llevado a Karina Milei a excluir a la vicepresidenta de las decisiones sobre una agenda política, denunciando que Villarruel opera con una “agenda propia”, lo que ha cosechado reproches dentro del oficialismo. Este clima de tensión no solo impacta en sus relaciones personales, sino que también podría tener repercusiones significativas en la estabilidad del partido y la dirección de las políticas públicas.