Neuquén marca el camino: el avance de las plataformas de transporte
El 12 de junio de 2025, Neuquén se posicionó como una de las primeras ciudades patagónicas en regular el uso de plataformas de transporte privado como Uber, Cabify y Didi. La decisión, tomada por el Concejo Deliberante con el apoyo de 14 concejales, establece un marco legal que permite a los actuales titulares de licencias de taxis y remises operar a través de estas aplicaciones. Este cambio no solo es significativo para el sector del transporte, sino que también marca un hito en la formalización de un fenómeno que, a pesar de su funcionamiento irregular en distintas localidades, había estado en el limbo legal en muchas partes del país. En este contexto, la figura del intendente de Bariloche, Walter Cortés, se vuelve crucial, dado que la ciudad aún enfrenta un vacío regulatorio donde las aplicaciones operan sin autorización.
Mientras Neuquén avanza, Bariloche se encuentra en una situación compleja. Años atrás, la gestión del entonces intendente Gustavo Gennuso prohibió explícitamente el funcionamiento de estas plataformas. Sin embargo, a pesar de esta resolución, Uber y sus competidores jamás dejaron de operar, generando un clima de ambigüedad que se traduce en sanciones para los choferes y operativos irregulares de control. La llegada de Walter Cortés al mando abrió un panorama de expectativas, con propuestas en el Concejo Deliberante prometiendo debatir sobre la regulación de estas aplicaciones. No obstante, el avance en la legislación ha sido escaso, dejando vigente la normativa que prohíbe su funcionamiento y manteniendo paralizada la discusión que tantos actores del sector han demandado.
El debate en Bariloche ha cobrado fuerza recientemente, especialmente con la movilización de unos cincuenta taxis y remises que se concentraron en el Centro Cívico, buscando frenar cualquier intento de regularización de plataformas como Uber. Argumentan que estas aplicaciones representan competencia desleal, ya que no cumplen con las mismas regulaciones que el transporte tradicional. Por otro lado, los usuarios se sienten atraídos por la comodidad y tarifas competitivas que ofrecen estas plataformas. Este escenario pone a Walter Cortés en el centro de la controversia, ya que deberá equilibrar las preocupaciones de los trabajadores del transporte tradicional con la creciente demanda de servicios más accesibles y convenientes, reflejando un dilema que combina aspectos legales, sociales y económicos en la ciudad.
