Más de 200 hogares catastrados tras el paso del tornado en Puerto Varas
La reciente devastación provocada por un tornado en Puerto Varas, en la región de Los Lagos, ha dejado una huella profunda en la comunidad. A tan solo cuatro días del fenómeno meteorológico, las autoridades han informado que más de 200 viviendas han sido catastradas, evidenciando la magnitud del daño. Las labores de evaluación continúan, con un foco principal en asegurar el bienestar de quienes han perdido su hogar. La comunidad se encuentra en un momento crítico, ya que se aproxima un nuevo sistema frontal que traerá lluvias, lo que resalta la urgencia de la situación.
Para ofrecer un alivio inmediato a los afectados, está previsto que se entreguen 50 viviendas de emergencia. En la zona devastada, un gran número de voluntarios, incluidos efectivos en formación de Carabineros y conscriptos del Ejército, están trabajando incansablemente en el despeje y la remoción de escombros. Además, se ha habilitado un centro de acopio en el gimnasio fiscal de Puerto Varas, donde se están organizando donaciones que la comunidad ha estado aportando generosamente. Las ollas comunes activadas en las parroquias locales están asegurando que se brinden alimentos a quienes más lo necesitan, mostrando así el espíritu solidario de la población.
Por su parte, la subsecretaria de Servicios Sociales, Francisca Gallegos, visitó la zona para supervisar el levantamiento de información necesaria para las fichas FIBE, un sistema que permite caracterizar socioeconómicamente a los hogares afectados. El proceso de digitalización de datos avanza rápidamente, lo que facilitará la elaboración de listas para llevar ayudas económicas acorde al grado de daño sufrido. El alcalde de Puerto Varas, Tomás Gárate, destacó la importancia de enviar esta información al Ministerio del Interior para asegurar la llegada de las viviendas de emergencia a través de Senapred. Además, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta Ante Desastres ha emitido una Alerta Temprana Preventiva, ante pronósticos que advierten sobre posibles nuevas tormentas y tornados, manteniendo a la comunidad en alerta ante cualquier eventualidad futura.