El Desfile de Roberto Piazza: Glamour y Política en el Corazón de Barracas
La noche del lunes, el histórico salón Señor Tango se vistió de gala para celebrar los 50 años de trayectoria del diseñador Roberto Piazza. En un evento que fusionó la alta costura con el compromiso social, Piazza presentó una colección orientada hacia el futuro, específicamente 2025, todo con un fin benéfico en apoyo a la Fundación Contra el Abuso Infantil. La velada no solo atrajo a rostros conocidos de la moda y el espectáculo, sino que también fue testigo de un momento político inesperado, con la presencia del presidente Javier Milei y la icónica Mirtha Legrand, quien sorprendió a todos con un discreto pero contundente mensaje.
Mirtha, vestida por el renombrado Claudio Cosano y acompañada por su eterno asesor de imagen Héctor Vidal Rivas, ocupó un sitio privilegiado en primera fila, siendo recibida con aplausos y afecto por parte del público. Su retorno a la escena se resaltó en un momento cumbre del evento cuando, al mirar hacia el palco presidencial, lanzó: “¡Viva la libertad, carajo!”. Esta declaración resonó intensamente en la sala, provocando una ola de aplausos y vítores, mientras Milei, visiblemente satisfecho, asentía con una sonrisa en su rostro. Las redes sociales no tardaron en hacerse eco de la frase, que pronto se volvió viral, convirtiendo un desfile de moda en un inesperado foco de atención política.
El evento fue un verdadero espectáculo, donde la presencia del mandatario argentino no pasó desapercibida. Su relación personal con Piazza, reforzada tras un almuerzo en la Quinta de Olivos, fue evidente al momento de su llegada, que estuvo acompañada de un exhaustivo operativo de seguridad y de figuras clave de su gabinete. Piazza, fiel a su estilo excéntrico, entró al recinto en un Chevrolet Corvette blanco de 1962, desatando una ovación entusiasta. Durante su emotivo agradecimiento hacia el Presidente, no solo mostró admiración, sino que también buscó una conexión más profunda. El desfile, repleto de celebridades como Lizy Tagliani y Mariano Martínez, se convirtió en un espacio donde la moda y la política se entrelazaron, magnificando el impacto de las palabras de Mirtha y convirtiendo una noche de celebraciones en un momento de reflexión nacional.