La regulación de indemnizaciones laborales en Argentina ha dado un paso significativo con la reciente normativa emitida por la Comisión Nacional de Valores (CNV). A partir de ahora, las empresas y sus empleados tienen la opción de reemplazar el tradicional régimen de indemnización por antigüedad con un nuevo Sistema de Fondo de Cese. Este esquema busca introducir mayor flexibilidad y alternativas en la gestión de las indemnizaciones, permitiendo a las partes involucradas elegir entre mantener el método clásico o adoptar un modelo más moderno y diversificado. De esta manera, se abre un espacio propicio para la negociación laboral y se promueve la autonomía de trabajadores y empleadores.
El nuevo Sistema de Fondo de Cese ofrece tres alternativas que complementan el régimen vigente, facilitando la implementación de Fondos Comunes de Inversión (FCI) y Fideicomisos Financieros (FF). Esta puerta abierta a nuevas posibilidades brinda a los trabajadores la oportunidad de elegir un esquema que se ajuste a sus necesidades y aspiraciones. Los convenios colectivos, estipulados por la Resolución General 1071 de la CNV, serán fundamentales para definir la mecánica de estos fondos, incluyendo el porcentaje de salario o monto fijo a destinar, así como la periodicidad de los aportes. Esto no solo enriquece la carta de opciones disponibles, sino que también promueve un ambiente de colaboración y negociación entre sindicatos y empresarios.
Un aspecto crucial de este nuevo modelo es la protección del Fondo de Cese Laboral. Este fondo estará a salvo de embargos y no podrá ser susceptible a suscripciones ajenas, garantizando así que la inversión realizada sea segura hasta su activación a favor del trabajador. La CNV jugará un papel vigilante sobre el manejo de estos fondo, asegurando que se respeten los derechos de los trabajadores a lo largo del proceso. Además, la posibilidad de administrar estos fondos a través de OFIs y FF introduce una dinámica innovadora, mejorando las chances de maximización del capital y brindando a los trabajadores cierta libertad en la elección de políticas de inversión. Con todas estas medidas, se espera que la reforma laboral genere un impacto positivo en el mercado de trabajo argentino, adaptándose a las necesidades actuales.