La Preparación del Peronismo para el Debate Presupuestario
En medio de un clima político tenso y repleto de expectativas, el Gobierno se encuentra en plena planificación de las sesiones extraordinarias, donde se discutirá el Presupuesto 2026 y un conjunto de reformas vitales. Aunque aún falta el decreto que haga oficial esta convocatoria, el peronismo ya está en modo de trabajo, preparado para un intenso debate en el que no solo se expondrán objeciones, sino también propuestas concretas. Este enfoque de “confrontación constructiva” busca evitar el bloqueo absoluto en el Congreso, un cambio de paradigma que podría hacer más eficiente la discusión legislativa.
Los miembros del bloque peronista en la Cámara de Diputados han optado por no rechazar de manera sistemática las propuestas del Gobierno. En su lugar, se preparan para ingresar al debate con sus propias iniciativas, dispuestos a ofrecer alternativas en aquellos temas que consideran problemáticos. Durante una reciente reunión del Consejo Nacional del Peronismo, se ratificó esta estrategia, que se asemeja a una enmienda de cara a un debate que promete ser complejo. Entre los principales puntos de discusión se encuentran la reforma impositiva, el Código Penal y la legislación laboral, que podrían ser pospuestos para hacer espacio a un análisis más profundo.
Además, el contexto se enriquece con el respaldo de importantes actores sindicales. Las reuniones con la CGT y las dos CTA muestran un compromiso por parte del peronismo para incorporar las necesidades del mundo laboral en este proceso. Germán Martínez, presidente del bloque Unión por la Patria, subraya la importancia de un presupuesto que no solo redistribuya los recursos, sino que también fomente el crecimiento y establezca prioridades para las provincias. La perspectiva de un cambio significativo en la legislación laboral resuena como uno de los focos centrales. La propuesta es ir más allá de simples ajustes normativos e introducir incentivos que realmente contribuyan a la creación de empleo registrado. En este sentido, el Partido Justicialista se posiciona de forma proactiva, sabiendo que el futuro del empleo en Argentina está directamente ligado a la implementación de políticas económicas coherentes y efectivas.
