La llegada del invierno y las lluvias en Chile: precauciones para peatones y conductores
Con el inicio del invierno, las lluvias en Chile se convierten en una factor común, trayendo consigo no solo la frescura y el riego necesario para el campo, sino también una serie de desafíos en las zonas urbanas. Uno de los problemas más notorios son los anegamientos en calles y avenidas, que a menudo crean situaciones peligrosas para peatones y ciclistas. En medio de este panorama, surge una normativa clara: los conductores que mojan a peatones al pasar por charcos pueden ser multados. Esto no solo es importante desde el punto de vista legal, sino que también resalta la responsabilidad que tienen los conductores en resguardar la seguridad de quienes se encuentran en la vía pública.
La Ley de Tránsito 18.290 establece en su artículo 122 que, ante la presencia de agua en la calzada, el conductor tiene el deber de cuidar que ésta no moje la acera ni a los peatones. Este precepto, aunque a veces parece pasar desapercibido, es fundamental para promover un ambiente más seguro en las ciudades. Practicar la conducción responsable no solo mejora la convivencia entre automovilistas y peatones, sino que también contribuye a darle un sentido de comunidad a nuestras calles. Sin embargo, no siempre observamos el cumplimiento de esta norma, lo que provoca que muchos ciclistas y transeúntes sean empapados por la falta de consideración de algunos conductores al pasar por pozos de agua.
Si un peatón es moka por un conductor que no ha respetado esta normativa, es crucial que sepa cómo actuar. Lo primero es anotar la patente del vehículo responsable y dirigirse a la comisaría de Carabineros más cercana para realizar un reclamo formal. En aquellos casos en los que no se pueda realizar esta acción de inmediato, los afectados tienen la opción de respaldarse con imágenes de cámaras de televigilancia, que son accesibles al solicitarlo en la misma comisaría. En caso de que se demuestre la falta, el infractor podría enfrentar una multa que oscila entre 0,5 y 1 UTM, equivalente a entre 34.393 y 68.785 pesos chilenos, según la Ley de Tránsito. De esta manera, tanto peatones como conductores pueden contribuir a un entorno más seguro y respetuoso en el espacio público.
